"Nos piden más": Chimpay recupera la elaboración de vino con un emprendimiento familiar

Chimpay.- Chimpay Cocina provocó una unidad entre la gastronomía, los productos que le dan identidad a la región y el valor de lugares muy atractivos que permiten imaginar el crecimiento del turismo. También el evento estuvo decorado de historias de vida.Héctor Juanico mostró con orgullo el vino surgido de la primera cosecha de cara al río. Su hija, Micaela es enóloga y la propuesta -contó Héctor- fue que iniciara su emprendimiento con el acompañamiento de la familia. Con esfuerzo y mucha dedicación lograron dar los primeros pasos del vino que se llama Oh, no!.El vino de la familia Juanico tiene un significado especial porque Chimpay perdió en los últimos años las bodegas que durante tanto tiempo distinguieron la zona. El viñedo está a 7 kilómetros de la localidad, en el kilómetro 1052."Para tener un buen vino hay que empezar con un buen viñedo para lograr una buena uva", explicó Héctor. Luego, asoma el criterio de cada emprendimiento. El trabajo comenzó hace cuatro años y el vino exhibido en Chimpay Cocina fue fruto de las primeras cosechas.La dirección del emprendimiento está a cargo de Micaela que hace 5 años fue coronada como reina de la 37ª edición de la Fiesta Provincial de la Vendimia en Villa Regina. Evidentemente, las uvas fueron mostrándose en el camino de la ahora enóloga.

"Es bien familiar, cada vez que comienza la cosecha, convocamos a parientes y amigos para cumplir con la tarea"

El emprendimiento es bien familiar. De hecho, cada vez que comienza la cosecha, convocan a parientes o amigos para cumplir con la tarea. Oh, no! aún no se comercializa porque la cantidad es insuficiente. Están ahora en la etapa de compartirlo con amigos y amigas para que den su veredicto. "Nos piden más, esa es una buena señal", sonríe con entusiasmo el papá de la enóloga.