23/07/2022

Historias de La Julia: Personal de campo y puesteros (1908-1975)

Historias de La Julia: Personal de campo y puesteros (1908-1975)
Captura de pantalla 2022-07-23 a la(s) 12.19.15
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Por Ricardo E. GarbersTratar de describir las tareas que desarrollaba el personal de campo en La Julia es casi un imposible sin olvidar circunstancias de peligro o de cansancio extremo, juntadas y arreos con frío extremo, así como también tórridas jornadas. Repito, es imposible poder resumir en algún párrafo el esfuerzo realizado por el personal de campo a lo largo de los años.Había profesionalidad y habilidad en las diferentes tareas llevadas a cabo en la estancia; juntadas, yerras y apartes, vacunaciones y bañadas de ovinos, arreos y recorridas, reparaciones de molinos y aguadas así como de corrales y mangas.Mas de uno debe pensar que estoy exagerando cuando hablo de profesionalidad del personal de campo cuando era normal que solo tuvieran educación primaria muchas veces apenas comenzada, pero no estoy exagerando ni agrandando su importancia.Y así se demuestra; subite a un caballo y anda simplemente a recorrer, esa tarea de aspecto rutinario tenía una gran multiplicidad de acciones, observaciones y conclusiones. Ni bien salís, recién ensillado el caballo, empezá a ver los pastos y las matas (arbustos) porque a lo largo de todo el recorrido debes ir evaluando en que situación se encuentra la oferta forrajera (pastos disponibles) para llegar a una conclusión al finalizar el recorrido. Para ello debes conocer la flora local, su crecimiento, su desarrollo y si está siendo pastoreada por la hacienda.De dicho análisis forrajero surgen las decisiones a ser tomadas, como aumentar o disminuir la carga animal (cabezas por lote) o incluso dejar descansar el potrero hasta que se recuperen los pastos y el monte.De la floración y fructificación de los chañares depende si habrá fruta de chañar a la sombra de los mismos para consumo de los lanares. De la lluvia arisca de la región dependen los pastos de estación, pero también dependen los pajonales, dependen las matas que deben recuperarse de las sequias como del ramoneo (comer ramitas) de los animales cuando falta el pasto.
El personal de campo conocía todas esas variables de importancia estratégica en la producción ganadera en la región nor-patagónica que, además, se transmitían de padres a hijos y de grandes a jóvenes aprendices. Era la transmisión oral de la información y de la manera de hacer las cosas, aquellas que apuntalaban y defendían el éxito de cada campaña ganadera.Desde mi óptica de ingeniero agrónomo creo imposible que algún colega tenga esa habilidad de reconocer “la oferta forrajera” al momento de graduarse, a menos que haya cumplido en algún momento tareas de peón de campo con suficientes horas-caballo para haberlo aprendido ”in situ”(en el sitio, en latín) y seguramente con las oportunas indicaciones de un conocedor del tema.La cuestión forrajera era solo uno de los tantos aspectos que debía observar, recopilar, evaluar, analizar para luego elaborar un diagnóstico, realizado de manera empírica y casi automática; como sin darse cuenta obtenía la información exacta para transmitirla al encargado o al mayordomo.La sanidad animal, el estado nutricional, el servicio y la parición era otros aspectos que el hombre recorredor de a caballo debía ir observando y analizando para transmitir la informaciónEl estado de las lagunas, molinos y aguadas, el estado de los alambrados y las tranqueras, los rastros de pumas, zorros o jabalíesentre otras tantas tareas y observaciones.Respecto a las demás tareas, sabiendo que omitiré sin quererlo a varias de ellas, eran las siguientes: juntadas de hacienda, tareas de corral, yerra y señalada, vacunación de la hacienda, amansada de caballos, reparar molinos, corrales, construir y/o mantener los alambrados y la línea telefónica a los puestos y a la Estafeta Postal de Colonia Josefa, hacer leña de sauce en la costa, apagar los incendios de campos y de sauzales y eventualmente colaborar en el control de incendios en los campos vecinos.Durante las décadas del 10 y del 20 del siglo pasado una tarea de importancia era el traslado en carretas de la producción lanera hasta la estación Darwin del Ferrocarril del Sud para su traslado a Bahía Blanca, donde se comercializaba. También se trasladaba a carreta la producción de semilla y fardos de alfalfa producida en las chacras de la costa del río.
Un párrafo especial merecen los extranjeros que vivieron en La Julia, desde Max Wehlte (alemán), Scott (inglés) Giuliani (italiano) hasta todos los chilenos araucanos migrados de Temuco Pueblo (así lo decía Caneo) que ingresaron todos por el Paso del Copahue en algún verano de comienzos del siglo 20, incluso Don Juan Tripeilao, establecido allí desde antes que el establecimiento Chañares Altos fuese adquirido en 1908 por Guillermo Garbers (alemán) y denominado La Julia (el nombre de esposa de nacionalidad suiza).Ese gran apego al trabajo de los hombres de campo, muchas veces apuntalada por esposas e hijas, también tenía sus momentos de esparcimiento en la celebración de bautismos, cumpleaños, fiestas patrias y las fiestas de Navidad y de fin de año. Podían ser asados, a veces con juegos y bailes para alegría de todos los que vivían en la estancia en medio de aquellas vastedades tan poco pobladas. Era una verdadera alegría que se reunieran los mensuales, puesteros y chacareros y así compartir conversaciones, historias y novedades en un ambiente de calidez y fraternidad.Toda esta información fue recopilada a partir de borradores y bocetos producidos por Emilio G. Andrich y el libro de sueldos original de la estancia, gracias a la valiosa colaboración amablemente brindada por Enrique Munilla Garbers (Riqui), mi primo mayor.Recalco nuevamente que seguramente he omitido a muchos de los que participaron de las tareas rurales en La Julia, pero vaya un gran saludo y nuestro reconocimiento a cada uno de ellos.Recibiré con sumo agrado toda información acerca de aquellos que no han sido aquí mencionados y que deban ser agregados a los listados que serán publicados en futuras actualizaciones. Muchas gracias.Nómina de Mensuales y Puesteros (1908 - 1975):
  • Andrade Teófilo
  • Agüero Pedro
  • Antuí Félix
  • Aranda
  • Banegas Ramón
  • Benítez Antonio "El Zurdo"
  • Benítez Juan
  • Beltrán Beltrán
  • Bonifacio Atilio
  • Bonifacio Doroteo
  • Bonifacio Eleuterio
  • Bonifacio Perico
  • Botinelli Américo
  • Botinelli Hermógenes
  • Campetti Enrique
  • Caraciola Pérez
  • Carrillo Simón
  • Chavero Huinca
  • Chavero Roberto
  • Contreras Osvaldo
  • Contreras padre
  • Curihuil Carlos Cuyunao Juan
  • Denis
  • Don Giuliani
  • Farías Moises
  • Ferreyra Bonifacio
  • García Ramón
  • Gomensoro
  • González Pedro
  • Iriarte Tomás (hijo)
  • Isagaray Miguel
  • Ivansich Salvador
  • Kolodresky Juan
  • Kühn Guillermo
  • Llanquileo Jacinto
  • Luquet Clemente
  • Malvido Damián
  • Malvido Demetrio
  • Malvido José
  • Malvido Sixto
  • Malvido Negro
  • Mariano Caneo
  • Mariano Paulo
  • Milache Huenche
  • Molina Juan
  • Morales Victor
  • Núñez Eusebio
  • Ocampo Albano
  • Ocampo Venancio
  • Orozco
  • Páez Jesús
  • Palomares
  • Peinefil (Painemil)
  • Peñalva Pascual
  • Pilquimán Juan
  • Pilquinao Juan
  • Quidel Mariano (Millallan)
  • Quidel Alonso
  • Quidel Ignacio
  • Racho
  • Ramírez Rafael
  • Don Rito
  • Mariano Caneo
  • Rodríguez Esteban
  • Rosas Cornelio
  • Rosas Albino Raúl
  • Rosas Billiken
  • Rosas Cristobal (Pichi)
  • Rosas Horacio
  • Rosas Negro
  • Rosas Valerio
  • San Martín Pedro
  • Salazar Venancio
  • Sayago Juan
  • Scott Roberto
  • Sosa Pedro
  • Tranqhuelaf Juan
  • Tripeilaf Milache José
  • Tripeilao Juan
  • Villanueva Eliseo
  • Villaroel Liberato
  • Wehlte Max
  • Zárate Benito
  • Zequeira Dionisio
Ricardo E. Garbers - Julio 2022
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