Oscar Pérez, vecino de Choele tripulante de la Fragata Libertad: "Fue una experiencia emocionante"

Choele Choel.- En el día de mañana, por primera vez en la historia, la Fragata "ARA Libertad" se acerca a las orillas del Balneario "El Condor", próximo a la ciudad de Viedma. Y, a partir de la visita, se plantean muchas preguntas, sobre cuál es la función de esta embarcación, que nos representa a nivel mundial.Entre tantas historias en torno a este tema, apareció la historia de un reconocido vecino de la ciudad, Oscar Pérez, el cual tuvo la experiencia de viajar a distintas partes del mundo, como tripulante de este buque escuela, cuando pertenecía a la Armada Argentina. Hoy, con mucha nostalgia relata cómo fue esa experiencia y qué significó ser parte de la Fragata Libertad.Oscar, más conocido como "el cordobés", si bien trabajó durante muchos años, en una empresa de correo nacional, también fue parte de la Armada Argentina, cuando era marinero de esta fuerza.Cuando tenía 17 años, ingresó a la Marina de Guerra en la Escuela Mecánica de la Armada, donde cursó durante un año como aspirante. Luego de esta etapa de instrucción, fue enviado al "destructor Rosales", en Puerto Belgrano. Allí, estuvo un año. Después, fue trasladado a la "Lancha Petren", que navega las aguas del Río Paraná, el Tigre y el Delta. Más adelante, le llegó el traslado al porta aviones "25 de Mayo". Ahí, estuvo un año y medio hasta que fue enviado a la base Almirante Salt de Trelew, al batallón 4 de Infantería de Marina. "De aquí, nos llevaron a Ushuaia por el conflicto limítrofe con Chile. Luego de servir en este lugar, me enviaron a la Fragata ARA Libertad", expresó.Llegó con apenas 23 años. Un 31 de Mayo salieron rumbo a Brasil. Desde ahí, tuvieron 14 días de navegación hasta llegar a las costas de Santo Domingo, Rep. Dominicana. "El viaje continuó y llegamos hasta Estados Unidos. Pasamos por el famoso triángulo de Las Bermudas, una isla muy conocida que se llama Hamilton". Continuando con el itinerario, fuimos a Londres, Rusia, Dinamarca, Alemania y Francia, donde se quedaron unos días de vacaciones en Paris.Pero el recorrido, no terminó ahí: "A los días, salimos rumbo a Portugal, España, las Islas Canarias y Dakkar (capital de Senegal). Continuamos el viaje por el Océano Atlántico, llegamos a Brasil y luego a Montevideo hasta llegar nuevamente a nuestro país. El viaje duró 6 meses y 12 días", recordó Oscar.

Sobre qué significó este viaje "el cordobés" agregó: "Puedo decir que haber participado en este viaje, fue algo muy emocionante. Pude conocer diversas culturas y, sobre todo, en la Fragata Libertad. Será un recuerdo que me quedará durante toda mi vida".

"Durante este viaje, fuimos 360 tripulantes, entre oficiales, sub oficiales, marineros y cinco conscriptos como premios por haber terminado el ciclo de estudios. Este viaje, se hace para los que egresan como guardia marina, que se reciben en el Liceo Militar de la Marina, y durante el recorrido, rinden los últimos exámenes", agregó.Sus funciones fueron de lo más diversas: estuvo como mayordomo, radarista, maquinista, cocinero, lavandero, entre otras. "Cumplí muchas funciones en esta embarcación. En esos viajes, hay que aprender de todo".

Para Oscar, la Fragata es un símbolo de paz: "Cuando arribábamos a un puerto, nos recibían los embajadores, nos brindaban un agasajo y también personalidades del espectáculo y deportistas visitaban la Fragata. En Inglaterra estuve con Ardiles y Villa, en Las Palmas y Canarias con Brindisi y Morete".

,  recordó con emoción.Sobre las funciones que realiza la Fragata explicó que es un buque escuela. Tiene dos cañones que tira salva, es decir, cuando se arriba a algún puerto se tiran disparos de salva anunciando su llegada. Además, cuenta con una banda de música, que cuando llegábamos al puerto tocaba el Himno Nacional Argentino.El cordobés, detalló que luego de este gran viaje, pidió su baja en la Armada, porque sino, tenía que renovar contrato por 4 años más. "Luego de haber pasado por esta etapa en mi vida, volví a la localidad de Villa del Rosario en Córdoba".

"Luego, conocí a los hermanos Bidegain, de acá de Choele, y me ofrecieron venir a esta ciudad, donde me quedé a trabajar y formé mi familia", contó sobre cómo llegó a la localidad.

"Haber pasado por esta embarcación, es un hermoso recuerdo que me quedará por siempre en la memoria. Fue una experiencia inolvidable", resumió conmovido.